Sexting, consejos para el sexo a distancia
Hace no tanto tiempo, en cualquier periódico, podíamos encontrar una sección de contactos donde aparecían anuncios muy calientes. Los había de chicas que estaban dispuestas a darte un placer extremo en vivo y en directo, pero también unas líneas calientes a las que podías llamar a cualquier hora del día. Serías atendido por una chica con una voz melodiosa y sexy, que te hablaría de lo que llevaba puesto, subiendo poco a poco la conversación de tono. De esa manera, muchos hombres tenían una de sus experiencias más increíbles a través de un teléfono. ¿Es capaz de excitarnos tanto una simple conversación? Los asiduos a aquellas líneas eróticas pudieron comprobar que sin duda era así. El sexo telefónico se convirtió, de hecho, en una adicción para muchos, que lo consideraban un “mal menor” frente a estar con una prostituta. No engañaban a sus mujeres, no tenían que pagar tanto dinero, y el placer al final era el mismo… o casi.
Luego llegó Internet y dejó a casi todo lo demás anticuado. A los periódicos, a las líneas calientes y al sexo a distancia, aunque en este último caso, lo convirtió en algo mucho más especial. Gracias a las nuevas tecnologías, hoy en día podemos estar en contacto con nuestra pareja incluso a miles de kilómetros, con una imagen y un audio perfecto, para dejarnos llevar por la pasión. El sexting se está poniendo cada vez más de moda, y no solo entre parejas consolidadas, sino también entre desconocidos que tal vez solo haya coincidido una vez, o se hayan visto en Instagram. El sexting va desde los mensajes hasta las videollamadas, y puede ser más o menos explícito. Esto ya será cosa de cada cual, desde luego, pero de lo que no cabe duda es de que esta realidad se está haciendo cada vez más popular. Hay muchos hombres que tal vez no tienen tanta seguridad como para hablar de esas cosas con las chicas, pero por Internet sí que lo pueden hacer. Chicas que se dejan llevar mucho más a través de la pantalla que en vivo y en directo, algo lógico por otra parte…
El sexo en la era de Internet
Las cosas han cambiado mucho en estas última dos décadas, sobre todo por la expansión y consolidación de Internet. Hoy en día todos estamos conectados, a través de nuestro ordenador y de nuestro teléfono, a la red de redes. Y eso nos ha permitido estar también más conectados a los demás, pudiendo mandar mensajes o hacer videollamadas de forma gratuita. Cualquier excusa es buena, pero por supuesto, el sexo se ha convertido en una de las mejores para aprovechar las ventajas de la nueva era cibernética. Internet acerca mucho a las personas, las conecta, y sirve como enlace para cuando estamos lejos. Y el sexo a distancia es ahora mucho más especial, porque no se trata solo de escuchar una voz, sino también de ver a nuestra pareja en pantalla, llegando a límites insospechados.
Cómo hacer buen sexting
El sexting suele empezar siempre con mensajes, así que este será el primer campo que debemos tener en cuenta. Si vamos a mandar mensajes a nuestra pareja seguramente sepamos muy bien lo que le gusta, aunque también debemos sorprenderla con un tono algo más explícito del habitual. Si por el contrario, la persona con la que nos texteamos es desconocida, debemos tener buenas frases de apertura. Una conversación en la que la temperatura suba de forma gradual, sin ser demasiado directos, pero dejando claro que venimos a lo que venimos. Los mensajes pueden ir acompañados de fotografías, siempre tomando precauciones para que no se nos reconozca, sobre todo con personas desconocidas.
Mandar nudes también se ha convertido en una moda habitual, sobre todo entre los jóvenes. No lo hagas si no te lo piden, porque puedes echar al traste la conversación. Si la otra parte te pide demasiado pero no quiere mostrarte nada, desconfía. Si todo va bien y los mensajes han surtido efecto, tal vez podáis pasar al siguiente punto, el de llamaros o veros incluso por videollamada. Escuchar la voz de otra persona, que tal vez se esté tocando pensando en nosotros, es una de las cosas más excitantes que podemos vivir actualmente. Tal vez estemos lejos, pero la imaginación sigue haciendo de las suyas, y el momento será muy ardiente. Como decimos, hay que mantener siempre cierta discreción en este tipo de prácticas, para evitar que luego salgan a la luz, cosa que seguramente nadie desea.
Apps para encontrar contactos
Hasta aquí lo que puede dar de sí el sexting, una actividad que sin lugar a dudas nos puede dar muchas alegrías. Sin embargo, estarás pensando que no es fácil encontrar a chicos y sobre todo chicas tan lanzadas como para tener este tipo de conversaciones por Internet. Y es cierto que a veces no abundan, y es difícil encontrarlos, pero aparecen. Hay aplicaciones especiales, de hecho, para llevar a cabo sexting. Empezando por la popular Tinder, que seguramente esté más enfocada a los encuentros físicos, pero también sirve para estas prácticas, y siguiendo por Instagram. Los mensajes privados de estas redes sociales son un campo de entrenamiento perfecto para iniciar una conversación caliente. Algunas otras aplicaciones, como Signal o Disckreet, también son especialmente buenas para encontrar a gente con la que pasar un buen rato en la distancia.
Las profesionales del placer, también online
Si todavía no lo ves demasiado claro o piensas que, al no tener práctica, esto del sexting no va a salir tan bien, no lo dudes y ponte en contacto con una profesional. Hay escorts que se anuncian para servicios online como videollamadas o texteo de mensajes. Ellas, gracias a su experiencia, podrán servirte de entrenamiento perfecto para atreverte luego con esa chica que tanto te pone. Además, una profesional del sexo conoce muy bien lo que los hombres buscan en este tipo de llamadas, y no dudan en ir directas al grano. Será una experiencia inolvidable el hacer sexting con una amante de lujo, no solo por lo que nos puede ofrecer, sino por todo lo que aprenderemos en el proceso.